Juegos y Pc ¡Nueva Sección!

Últimamente estoy gastando bastante parte de mi tiempo en diversos juegos de ordenador, nunca me había molestado en probar juegos online y por circunstancias de la vida he acabado metiéndome en ese popular mundo virtual, es por esto que he decidido abrir una nueva sección llamada "Juegos", en la que tal y como hago en las otras secciones haré una valoración personal sobre lo que juego o dejo de jugar. Quiero aclarar que no me considero ni mucho menos gamer y que probablemente estas entradas sean escasas. No soy gamer, porque aunque juegue, no tengo una verdadera afición por el tema ni creo que llegue a tenerla nunca, paso muchísimas horas mirando la pantalla de un ordenador, pero no suele ser jugando a nada. 

Pues bien, aclarado esto, aquí os vais a encontrar las palabras de una chica que sabe poco de juegos y que no está interesada en saber mucho más allá que "lo bonito" que se vea en pantalla y lo entretenida que pueda ser la historia que se nos ofrece.

Como ya lo dice el nombre del blog, me estoy quedando ciega por las horas que invierto desgastando mis ojos, así que para mejorar la situación he decidido cambiarme la pantalla del ordenador, pasando de una del año de la tarara (Alrededor de ocho años) por una nueva Samsung  con Full HD de 22 pulgadas que además tiene televisión ¡Me tiene enamorah! Y ya que estamos podré ver magníficamente películas y series y disfrutar de los distintos juegos en una buena calidad gráfica (Ayer lo flipaba mientras me paseaba por los mapas de Guild Wars 2) 

Bueno seamos sinceros, realmente lo que pasa es que me he cambiado de gafas y de pantalla de ordenador, y me hacía mucha ilusión enseñárselo a alguien, pero no sabía donde hacerlo y al final me he decidido por este medio con la excusa de que voy a abrir una nueva sección. 

Peeeero, hoy para estrenarme no hablaré del GW2, ese juego ya tendrá su momento, si no de otra cosita muy especial que también me muero de ganas por sacar a la luz y presumir de ello. La verdad es que nunca me he tomado los juegos muy enserio y prefería verlos jugar que jugarlos yo misma, parece mentira porque durante mi infancia uno de los novios de mi madre era muy aficionado a los videojuegos y nos pasábamos tardes enteras jugando, y cuando este novio fue cambiado por otro, yo ya le había cogido el gusto a las aventuras gráficas y a los juegos de estrategia por lo que continué yo sola con el asunto. No se bien en que momento me desentendí de los juegos, pero el último que recuerdo para pc, sin contar los Sims 3, fue Harry Potter y el Caliz de Fuego (Ahora es cuando el lector se lleva las manos a la cabeza). El caso es que aunque no recuerdo cuando abandoné los juegos, si recuerdo  por cual hice una excepción. Para esta historia debemos remontarnos a hace tres o cuatro años, cuando los móviles táctiles empezaban a salir a la luz (Esto no tiene nada que ver pero quedaba muy épico), el caso es que para aquel entonces tuve a alguien que me prestó la Play 2 y otro alguien que me dejó el Kingdom Hearts (uno y dos) 

Creo que nunca he disfrutado tanto con un juego, el primero, el segundo no me gustó y no llegué siquiera a terminarlo. El KH reunían en él todo lo que me gusta: Diseños bonitos, historia chula, plataformas y Disney ¡DISNEY JODER! Así que lo disfruté un montón (Aunque no invertí tiempo en el coliseo porque me ponía nerviosa perder) 

Es por esto que no me dolió nada reservar la edición 1.5 resmasterizada y toda la pesca, para regalársela a mi novio en Navidad (Lo único que me duele es no poder abrirlo yo para ver el libro de ilustraciones y no tener Play 3 para poder jugarlo). Soy de esas personas que no conciben gastar dinero en juegos, pero por este no me hubiese molestado, igual que no me importaría pagar por un juego online masivo de Harry Potter (Pero bueno, esa también es otra historia) 

Así que... ¡Tachán! 

Esta es mi nueva adquisición, que por el momento hasta que vengan a recogerla me pertenece ¡MUAHAHAHA! Y aquí (Sin haber dicho nada realmente) dejo la entrada, cuando lo pruebe ya comentaré sobre lo genial y maravilloso que me ha parecido. ¡Morid de envidia!